Cómo Controlar su Ira

Medidas para evitar que la ira lo perjudique

La ira, es una emoción que perjudica a la persona que la experimenta y a la persona a la que se desata, sin mencionar el posible daño a la propiedad y la perturbación que podría provocar. Lo irónico es que incluso las personas que podrían estar ayudando a otros a superar su ira, se enojan cada vez también. Por lo tanto, pensar que una persona puede contener por completo la ira o disminuirla es un sueño utópico. Lo que se puede hacer, sin embargo, es controlarlo.

Hay dos formas principales de controlar el enojo: consultar u obtener psicoterapia de un profesional médico (salud mental y física), o simplemente tratando de contenerlo usted mismo. Controlar la ira no es una tarea fácil, pero se puede hacer en cierta medida utilizando los siguientes consejos.

Escapar de la situación en cuestión

Si bien evitar y alejarse de un problema no es recomendable, lo que se puede hacer es alejarse temporalmente de la situación para evitar tomar decisiones precipitadas. Salir a caminar al aire libre, cantar a todo pulmón, andar en bicicleta, practicar yoga o incluso hacer garabatos durante unos minutos, es una buena idea para liberar algunas de las acumulaciones.

Pausa la ira

Usar un reloj es una buena idea para las personas con problemas de ira. Cada vez que una persona se enoja, debe mirar el reloj durante dos o tres minutos, y luego tomar medidas o hablar, para evitar empeorar la situación.

Escríbelo todo

Escribir cartas dirigidas a la persona que es la fuente de la ira de alguien, es una buena manera de liberarla en el papel. Sin embargo, estas cartas no deben enviarse a la persona a la que están destinadas, para evitar remordimientos o problemas futuros. Otra forma similar de desahogar la ira que alguien tiene por una persona o hacia una situación es escribirlo todo en un diario.

Pellizcarse así mismo

Puede sonar un poco loco, pero pellizcarse es efectivo. El ligero dolor, la acción repentina y la sorpresa temporal distraen a una persona de la ira que siente. Sin embargo, una persona debe tener cuidado de no pellizcarse con demasiada fuerza, para evitar formar un hematoma.

Hable al respecto

Esto no significa que una persona deba expresar su enojo sobre la fuente de la misma; en cambio, significa que debe hablar en voz alta al respecto para decirle a alguien que se desahogue. La persona del lado de la audiencia debe ser completamente neutral con respecto a la situación. Recomendamos a un terapeuta un administrador de ira certificado para que lo atienda durante la situación. La idea de unirse a un grupo de apoyo y expresar su enojo y sentimientos allí también tiene mérito. Además, esto también ayudará a la persona enojada a tener una perspectiva mejor y más tranquila de la situación, al decirlo en voz alta, incluso si no recibe ningún consejo.

Por último, lo que todos deben saber es que no hay daño ni vergüenza en buscar ayuda. Consultar a un profesional es la decisión correcta si una persona tiene problemas para controlar su ira, incluso después de hacer un gran esfuerzo y probar amplios consejos de autoayuda.

Si a pesar de todo, las reacciones emocionales de ira siguen dándose de manera frecuente sin ser capaces de controlarlas, es aconsejable buscar la ayuda profesional, antes de que las personas del entorno habitual empiecen a alejarse. La terapia puede ayudar a cambiar actitudes que contribuyen a exagerar o magnificar hasta el dramatismo episodios que carecen de importancia real y a llevar a cabo una reestructuración cognitiva que permita gestionar adecuadamente la ira.